
¡Dios te ama!
"Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito,
para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna" (Juan 3:16).
A través de la muerte de Cristo en la cruz y su resurrección, se nos da la oportunidad de obtener la Salvación por la fe y restaurar la relación rota con Dios, mientras disfrutamos de la bendición de la vida eterna.
¿Qué debo hacer para ser salvo?
(1) Debes arrepentirte de tus pecados. Tu liberación de la fortaleza de nuestra maldición y destrucción comienza al reconocer nuestra pecaminosidad y mediante la fe en la muerte y resurrección de Jesús y el juicio que él llevó a cabo en nuestro lugar.
(2) Debes recibir a Jesucristo en tu corazón como tu Señor y Salvador.
"Porque todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo."
(Romanos 10:13).
¡El camino de Dios es el único! «Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe» (Efesios 2:8-9).
La seguridad de la salvación y el perdón del pecado.
La fe salvadora es confiar solo en Jesucristo y en lo que hizo en la cruz para salvarnos, en lugar de confiar en lo que tú hiciste para entrar al cielo. En el momento en que abrimos nuestro corazón a Jesucristo y depositamos nuestra confianza plena solo en Él como nuestro Señor y Salvador, Dios promete perdonar nuestros pecados, salvar nuestras almas y reservarnos un hogar en el cielo.



